¿Qué más puedo hacer para controlar mi salud?
Lleve un registro de los resultados de sus análisis de laboratorio
Es útil llevar un registro de los resultados de sus análisis de laboratorio y, después de cada visita de atención médica, registrar los valores. Sus metas para la presión arterial, la diabetes, la anemia, el colesterol y los problemas óseos y minerales son muy importantes. Si usted no sabe cuáles son sus metas, consulte a su equipo de atención médica.
Tome sus medicamentos
Es importante tomar todos sus medicamentos todos los días y exactamente como se le indicó. Si tiene problemas para tomar sus medicamentos o si experimenta efectos secundarios, informe a su equipo de atención médica. Ellos podrán ayudarle.
Coma alimentos saludables
Todas las personas tienen diferentes necesidades, pero la mayoría de las personas con insuficiencia renal deben controlar la ingestión de alimentos que contienen altas cantidades de determinados nutrientes, como potasio, sodio y fósforo. Usted también deberá controlar la cantidad de líquido que bebe cada día, la cantidad de calorías que obtiene de lo que come y bebe, y si está obteniendo todas las vitaminas y demás nutrientes que necesita. Si usted recibe un trasplante de riñón exitoso, habrá menos restricciones en cuanto a lo que pueda comer y beber. Un dietista con capacitación especial en insuficiencia renal puede ayudarle a planificar las comidas para que consuma los alimentos adecuados en las cantidades adecuadas. Consulte con su equipo de atención médica sobre la Terapia de Nutrición Médica (Medical Nutrition Therapy, MNT), un beneficio educativo proporcionado por Medicare.
Realice actividad física con regularidad
La actividad física ayuda a controlar la presión arterial, a reducir el colesterol y a mantener su corazón en funcionamiento lo mejor posible, y con menor esfuerzo. Estar activo le dará energía, reducirá el estrés y le ayudará a permanecer más independiente. También se ha demostrado que mejora la depresión y el estado de ánimo en general. No confunda la actividad física con el ejercicio intenso. Cualquier tipo de movimiento corporal ayuda: caminar, realizar actividades de jardinería, bailar, cuidar niños, incluso hacer las compras. La clave es encontrar algo que usted disfrute. Su energía aumentará con la actividad y, con el tiempo, podrá realizar más actividad. Siempre verifique con su equipo de atención médica antes de comenzar cualquier actividad física nueva.
Controle su estrés
El estrés es una parte normal de la vida, especialmente si tiene una enfermedad crónica. La meta del estrés no es eliminarlo sino controlarlo. Controlar el estrés le ayudará a mejorar su salud física y emocional. Hay muchas cosas que puede hacer para ayudar a controlar el estrés. Una de ellas es tomarse el tiempo para realizar cosas que disfruta. Otras pueden incluir: realizar actividad física, realizer ejercicios de relajación, respirar, la meditación, la plegaria, la música y muchas más. Algunas personas consideran que mantener una actitud positiva o el sentido del humor ayuda. Hable con su trabajador social si el estrés es un problema para usted. Su trabajador social puede ayudarle a encontrar formas para controlar o reducer su estrés.
Manténgase cerca de otras personas
Mantenerse cerca de otras personas y estar involucrado en el mundo que le rodea es muy importante. El apoyo social es algo que todos necesitamos, pero es especialmente importante para una persona con una enfermedad crónica. Si se siente aislado o solo, hable con su trabajador social. ¡Existen grupos de apoyo, mentores para pacientes y servicios de extensión comunitaria diseñados para personas como usted! (Consulte www.nkfcares.org).
Intente realizar cosas que disfrute y que también proporcionen apoyo social, como participar en clubs de caminata, realizar trabajo voluntario, cuidar niños o, incluso, tomar clases. Su trabajador social puede ayudarle a encontrar grupos y actividades a las cuales unirse. No se olvide de que usted también es un amigo y compañero valioso para otras personas. Recuerde que sus seres queridos también pueden necesitar su apoyo. Los días que se sienta bien, pregunte lo que puede hacer por ellos.
Obtenga ayuda para la tristeza o la depresión si la necesita. Los estudios muestran que entre el 20% y el 40% de las personas con insuficiencia renal pueden tener depresión. La depresión puede hacer que le resulte más difícil concentrarse, recordar indicaciones, seguir los consejos de su médico o tomar medicamentos en horario. Si se siente demasiado triste, irritable, que no puede enfrentar cada día, que llora más de lo normal, que es una carga para otras personas, que está perdiendo el interés en cosas que antes disfrutaba o si siente que quiere rendirse, hable con su trabajador social. Usted puede estar experimentando depresión. Es importante saber que la depresión es una afección médica y que puede ser tratada con medicamentos, terapia o una combinación de ambos. No hay necesidad de que tenga depresión. Su trabajador social puede ayudarle a descubrir si lo que siente es causado por depresión y le ayudará a recibir el tratamiento que necesita.